Debido a mucho trabajo y a los cambios que se avecinan en mi vida privada, apenas puedo grabar por el momento. Por así decirlo, ya he anticipado algunos de los próximos episodios con algunas entradas aquí. Pero el plan es volver a ello muy pronto.
Un buen amigo, que desde hace algunos años se empeña en superarse a sí mismo con los regalos para mi cumpleaños, me regaló esta publicación conmemorativa del cincuenta aniversario de la Escuela Alemana Frutillar en agosto, junto con una moneda de mi tierra natal, Brandeburgo, que data de 1680.
El documento es muy revelador para un alemán que ha trabajado en un colegio alemán en Chile durante 11 años. Así que hay que añadir un episodio a esto. Hasta entonces, lo pongo a disposición para su descarga aquí, para aquellos a los que les guste recopilar fuentes históricas.